New Year's Resolutions

Cuarto intento de publicar la entrada sin que se me arruine todo antes de enviarlo. Ya en verdad ni me apetece ni nada, pero bueno, todo sea por ser coherentes con la temática del día. 

¿Y cuál es la temática del día, amiguitos? Los Propósitos de Año Nuevo.

Como cada Enero, además de las rebajas, la pobreza y la dieta post-Navidad, llega también el tiempo de hacer la tradicional Lista de Propósitos de Año Nuevo. En realidad, pensándolo un poco, es una chorrada y no debería de hacerla. Como no tengo ya suficiente con la cuesta de enero y todos los demás problemas, sólo falta cargar con un puñado de frustraciones en potencia extra colgando sobre mi conciencia.Y por escrito.

Aun así, a mí me encanta hacer listas y plánines* (-->*planings, pero yo les llamo plánines porque me parecen menos peligrosos y más cachondos así). Así que lo propósitos de año nuevo son casi una excusa para hacer Lista  nueva. Bueno, eso y que en realidad tampoco está mal pararse un ratito a pensar a ver por dónde podríamos intentar atacar así a primeras, cosa mucho más sana y productiva que sentarse a quejarse. Aunque también luego me siente a quejarme.

El caso. He encontrado la Lista del año pasado en mi blog pre-London y estoy aquí riéndome sola. Así que antes de ir de lleno con la nueva Lista, voy a hacer públicos aquí mis resultados (en formato resumen, si queréis ver los Propósitos en detalle, si le dais al link los veis), a ver si así me avergüenzo y la presión social me pone las pilas para este año.

X  1. Terminar mi bestseller. Pues nada, tendrá que encabezar un año más la Lista. Aunque he de decir que como ya lo tengo acabado -casi- en mi cabeza, me cuesta la vida ponerme a teclear. Me consuelo pensando que a Hitchcock le pasaba lo mismo con sus pelis, y míralo, no le fue mal.

V  2. Adoptar una actitud muy zen y muy a lo Santiago de El Viejo y el Mar ante las cosas. Quizá no todo el tiempo, pero sí es verdad que mejoré mucho este año, especialmente en my London. Así que hurra!

V  3. No sentirme culpable por hacer otras cosas que no sean buscar trabajo o lamentarme porque no lo tengo mientras no lo tengo. Teniendo en cuenta que tuve trabajo la mayo parte del año, no sé muy bien qué poner aquí. Nada, la tacho :D

V  4. Dejar de mi odio ancestral por la lluvia a un lado. Si!! De hecho me dijeron que es uno de los indicios de que ya eres londinense: el hecho de hacer planes y hacerlos igualmente tanto si llueve como si no. Yay!

V  5. Conseguir ahorrar un poco de ninerito para hacer un viaje.Teniendo en cuenta que he estado viviendo donde yo quería viajar, pues bien hecho. Y lo que es más: he ahorrado y he viajado por England. Hurra!

XXX  6. Dejar de pensar 828973957 veces las cosas antes de que ocurran. Es decir, dejar de vivir anticipando todo.  Las tres X gordas hablan por sí mismas.

X  7. Dejar de ser indecisa patológica* (*propósito completamente inalcanzable porque contra la Madre Naturaleza, la genética y los años de decisiones a destiempo no se puede, pero al menos ser un poco más decidida a la hora de tomarlas).  En fin...(aunque estoy mejorando, eh? Con una técnica muy chuli que ya contaré otro día.) 

V  8. Ahorrar un poco más cada mes. A pesar de que debido a ciertos problemillas hoteleros y aeropuertiles me dejé casi todos mis ahorros, ahorré mucho. Mejor no pienso eso que acabo de poner de mis ahorros...

X  9. Ir al gimnasio de una vez por todas. .....................

X  10. Escribir más de dos entradas por mes. Pues esto casi que lo conseguí durante un tiempo, pero nada, volví a las andadas cual borrega. A la lista de este año me da a mí.

Teniendo todo esto en cuenta, ahora sí:

NEW YEAR'S RESOLUTIONS 2011

1. Terminar mi bestseller. Y esta vez de verdad de la buena. Vale que no soy de fiar porque dije exactamente lo mismo, no sé si con las mimas palabras, hace un año. Pero lo dicho, de este año no pasa.

2. Actualizar el Blog todos los días -o casi- aunque sea con tonterías que no le interesan a nadie, ni siquiera a mí. ¿Por qué entonces? Pues porque cuando uno se plantea las cosas en plan 'tres veces por semana o algo así', la buena intención, mucha o poca, de hacer algo, jamás cuaja en hábito. Resultado: si eres como yo, te dejas de ir y al final nada de nada. En cambio, si escribo aunque sea una sola linea por día, obligadamente, al final se convertirá en un hábito y no me costará tanto hacerlo. ¿Beneficiará esto al mundo? Pues probablemente no. Pero yo me habré entretenido un rato, y es una forma de juntarme con la Drawing Room a pesar de la distancia :)

3. Ir a la multimédica sin que me dé tiempo a pensar excusas para no ir. Resulta que a mí los médicos no me terminan de cuajar. Recelo constantemente cada vez que tengo que ir, pensando que llegaré allí por un catarro y saldré con dos o tres enfermedades aún por descubrir. Otro de mis problemas es que no soy buena hablando por teléfono, vamos, que lo odio a muerte, y pedir cita en estos lares no es tan sencillo como pudiera parecer a priori (ya colgaré mis mejores conversaciones surrealistas con recepcionistas...). Y además es que esperar en la sala de espera no me termina de molar, sobre todo porque estoy con personas a las que he dado los buenos días al llegar y ni me han mirado a la cara, mucho menos contestado. Pero claro, ahora estoy teniendo asuntillos con mi rodilla izquierda, así que me lo voy a tener que plantear muy en serio.

4. Hacer todo en general sin que me dé tiempo a pensar nada. Pensar es malo y arruina vidas.Y si tu cerebro es Mordor, más aún. Asi que en 2011 voy a cogerme por sorpresa para todo.

5. Recuperar la forma física perdida. Este objetivo se concreta en: comer mejor (y dejar de comer compulsivamente pan con ibéricos), beber más agua y sobre todo salir a hacer algo de deporte. Teniendo en cuenta que no tengo dinero, pero que tampoco puedo correr porque no puedo (cachis, es lo más barato), ya veré cómo me las apaño.


6. Dejar de ser indecisa patológica. No pasa NADA si elijo una cosa y no otra. No pasa nada si me llevo un jersey/pizza/mueble/tipo de folio/zapato y no otro. No tengo por qué pasarme dos horas en una tienda angustiada porque no soy capaz de decidir pensando que la voy a cagar decida lo que decida, y nadie vendrá a matarme mientras duermo si elijo una cosa y no la otra.

7. Anticipar KK. De toda la lista, quizá esto es lo que debería ir de #1. Tampoco tiene más misterio. Vivir anticipando no es vida. Durante el casi año que he sido londinense he experimentado lo que sienten las personas normales y corrientes que no anticipan constantemente todo, y de verdad, qué respiro. Así que si se puede en London, se puede aquí. Digo yo.

8. Acostarme antes de la 1 am. Y si la 1 am os parece tarde, mejor no os cuento a qué horas suelo yo acostarme cotidianamente. Otra cosa que tengo que recuperar, que en London llevaba un horario tempranero y me iba estupendamente.

9. Habitación. Ordenada. YA. Y mantenerla así todo el tiempo que pueda.

10. Leer todos los libros que tengo antes de empezar a comprar más. Eso de que el saber no ocupa lugar, una leche.

Y después de esta entrada que pone en ridículo a los rollos del mar muerto, os recomiendo a todos hacer listas, que es muy divertido :).

Nos vemos! (en nada de tiempo según la resolution #2).