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23 de octubre de 2010

World Cup Revival

Mientras que sigo organizando todo el rollo de las fotos para la tercera entrega de mi vista a la casita de Jane Austen, os cuento que que acabo de ver a la Selección recogiendo el Príncipe de Asturias y me he emocionado.

Así que cuando me he dado cuenta estaba viendo videos. Mi favorito, cómo no, fue este que no sé si en España salió, me parece que no, pero aquí en London estaba a todas horas y me encantó pero mucho mucho. Y es que, futboleros como somos todos en mi casa, el bailecito de Milla siempre ha estado presente en la memoria, en especial en la de mi padre, que siendo el menos futbolero de todos, le encanta recordar el bailecito cuando ve alguna celebración así más cachonda de lo normal.

Quizá por todo ello este anuncio de los de siempre me encanta.Y porque además sí, es él al final, y me ha hecho ilusión verlo de nuevo, que debe dormir en almíbar cada noche porque está igual el campeón. Me resulta muy tierno ver ahí a los de su selección bailando como él, para él, y por supuesto él volviendo a hacer su bailecito (lo que me recuerda que le tengo que mandar este video a mi padre).

Os subtitulo por si os perdéis, que seguro que no, pero oye.

Twenty years ago, and african named Roger Milla,celebrated a goal in a way no one else ever had before: by dancing! And goal celebrations changed forever. 


Right then and there, he set everyone free.That simple dance snowballed into this uncontrolable madness  were fans and players just... let go. 


Because on that day, this man showed the world not only how to celebrate, but how to live.







PD: Gracias por regarme la foto de Basil ;)

5 comentarios:

Noelia Cano dijo...

jajaja seguro que tu padre tiene to el arte con el bailecito!! Besos gaditanos!

Marita dijo...

Lo genial de los anuncios de CocaCola es que derrochan alegría de vivir. Conozco a una chica que, estando embarazada, se emocionaba con ellos! Ya sabemos que las embarazadas están muy sensibles, pero esto lo supera todo.

No sé si debes darme la gracias por regar la foto de Basil... ¿recuerdas que mato a las plantitas por intoxicación hídrica? (por así decirlo, je, je, aunque yo creo que es exceso de amor).

Bss

Idoya dijo...

Yo que soy de las de la lágrima fácil, entiendo a la chica embarazada emocionándose con algunos anuncios... o a Bela viendo los premios "Príncipe de Asturias".

De todas formas, Bela, das cierta envidia sana que "obliga" a invitarte a que sigas disfrutando de todo esto de London porque esa sensación de estar lejos de casa y emocionarte por algo que, en casa, no te emocionaría esta genial ¿no?

Marita dijo...

Idoya! hija! ¿dónde te metes?! de repente estás missing, de repente apareces por Manhattan y London a la vez. Tienes una especie de ubicuidad intermitente, no?

Pues mira tú que yo creo que Bela, siendo tan futbolera, igual se emociona con la Selección Española en Gádir que en London. Esas pasiones se llevan muy dentro -lo veo en mi Josete, aunque él piense que no le comprendo-. En todo caso no hay nada como echarse unas lagrimillas de vez en cuando, por felicidad, por tristeza o por furia (como cuando Mr. Darcy le pide matrimonio a Elisabeth de aquella manera. ¡vaya cabreo que se agarra la moza! no es para menos).

Otra cosa ¿qué estais leyendo?. Terminé "Heredarás la Tierra", que es un dramón que te mueres. Con incesto, cuernos, suicidio, locura... vamos, que no "farte de ná". Y empecé "La Edad de la Inocencia", que me está gustando mucho.
Ahora tengo que pedir un regalo por mi cumpleaños y no me decido (paso de la ensayística). ¿"Carta de una desconocida" o "Sinué el egipcio"? ¿o alguno de Delibes? "El Camino" es delicioso y hace tiempo que me prestaron... ay! no sé. Decidme algo!!! por fa!

A este paso, Bela me va a mandar a la M... y que me haga un blog propio

Idoya dijo...

Marita, me ha gustado mucho lo de "ubicuidad intermitente" ;-)

Ahora, yo me estoy leyendo el mega-tocho de Wyoming, los cuentos de la Annie Proulx. Cuando lo acabe ya os contaré mi opinión pero hasta entonces no... por si cambio de parecer con la progresiva lectura.

Y, con el permiso de Bela, sobre qué leer, contaros que mi "Jane Eyre" particular es F.S. Fitzgerald. Quizás tenga que ver que si existiese la máquina del tiempo, yo me pasaría una temporada en el primer tercio del siglo XX; o quizás sea cómo va metiendo en sus novelas pequeñas perlas muy agudas; o quizás sea que de de adolescente vi en la tele "El gran Gatsby" y caí rendida a los pies de Robert Redford...

Bueno, sea el libro que sea que te pidas para tu cumple, Marita, ¡muchas felicidades!.

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